Tocar un instrumento musical tiene
muchos beneficios, entre ellos, ayuda al desarrollo motriz, las aptitudes,
la paciencia y la creatividad. Intentar tocar un instrumento musical a
edades tempranas le da al niño la posibilidad de descubrir un interés que
probablemente disfrute mucho. También le ofrece la posibilidad de desarrollar
su apreciación musical, así como también la dedicación a dominar el
instrumento. Con muchas opciones disponibles, intentar elegir un instrumento
parece ser una tarea imposible. Pero si te tomas el tiempo para considerar las
gratificaciones y los desafíos que cada instrumento ofrece puede guiarte a ti y
a tu hijo en el proceso de tomar una decisión.
Exponemos aquí varios
ejemplos de instrumentos musicales y sus ventajas frente a la actitud de los
pequeños:
El piano se puede tocar como un
instrumento solista, como acompañamiento o como parte de un conjunto. No es un
instrumento portátil y puede ser un poco caro para comprar. El órgano es una
versión eléctrica del piano y puede ser un poco más barato, además de ser
portátil. Si decides que tu hijo aprenda a tocar este instrumento, es
recomendable que elijas uno con teclas pesadas para que se parezca y se sienta
como el piano.
La batería es una parte vital de muchas
orquestas, bandas y grupos de música, y un niño puede sentir mucha diversión al
tocarla. Sin embargo, quienes estén cerca de él podrían no apreciar mucho el
ruido. Además, la batería también es difícil para transportar y puede ser una
compra costosa.
El clarinete es otro miembro de la
familia de los instrumentos de viento. Para producir sonido, necesita una pieza
de madera roja añadida a la boquilla. Como la flauta, el clarinete es un instrumento
liviano que es fácil de transportar y generalmente se usa en bandas y
orquestas. Este instrumento a menudo es la primera opción elegida debido a que
puede dar la base para aprender instrumentos similares como el oboe, el fagot y
el saxofón.
Los tambores son uno de los instrumentos
más económicos y que menos preparación exigen para comenzar. No necesitan
accesorios y un niño puede empezar a aprender el ritmo y las bases de percusión
inmediatamente. El tambor puede ser una excelente forma de introducir la música
y los instrumentos musicales a un niño…
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Así con numerosos
instrumentos musicales que ya conocemos. Pues bien, como conclusión podemos
decir que la música desde edades tempranas siempre favorece al desarrollo del
niño y que si se inculca a la vez el aprendizaje de un instrumento, este puede
desarrollar capacidades que sin ello no conseguiría.
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